"Me gustaría tener otro hijo"

Sábado 11 de Febrero de 2017, 11:30

Nico habló de todo.



No soy una persona que dimensiona los premios. Es importante que te reconozcan, siempre es lindo que distingan el trabajo de uno, pero, en definitiva, la vida sigue andando. El mayor agradecimiento es poder desarrollar la profesión que uno ama y poder vivir de ella. Sin embargo, admito que el premio es un mimo al alma y me gusta”.

Con esas palabras, simples y contundentes, Nicolás Cabré expresa el panorama que le presenta el haber sido distinguido con los premios Carlos y Vos por su trabajo protagónico en “El quilombero”, uno de los principales éxitos de la actual temporada de Villa Carlos Paz.

Cabré hace una pausa en el descanso de la lluviosa tarde del sábado y continúa la charla. “No tengo dudas de que voy a recordar con mucha alegría este trabajo de ‘El quilombero’.

Por los compañeros que me ha tocado compartir y por haber sido dirigido por Arturo Puig. La obra tuvo una gran recepción en Buenos Aires y ahora en Villa Carlos Paz continuamos cosechando el gran afecto de la gente”, acota el intérprete, para agregar el siguiente testimonio. ¿Drama o comedia? A gusto del consumidor y del artista.

“Más que el género a mí me interesa poder disfrutar del proyecto. Por sobre todas las cosas, mi objetivo es poder hacer bien el trabajo, y además no creo que haya un rubro más importante que otro”.

Sostiene, por otra parte, que en la actualidad tiene momentos de decisión muy puntuales: “Hoy me tomo las cosas de otra manera, elijo los lugares donde voy a estar más cómodo. Tengo un gran respeto por mi trabajo y para mí es fundamental determinar los tiempos y espacios de mi paternidad, que es lo que ha marcado mi vida de una manera muy potente”.

A modo de declaración de principios afectivos, dice: “Rufina es lo que más me importa en la vida. Es la razón de mi existencia. Lo primero que arreglo en cualquier proyecto de trabajo a definir son los momentos que voy a tener libres para compartir con mi hija”. Para Cabré, la circunstancia de ser papá “se va aprendiendo todos los días. Las necesidades de los hijos y sus gustos uno lo va aprendiendo de forma cotidiano. Reitero, para mí es lo más lindo que se me presentó en toda la vida. Y si yo estoy bien, voy a hacer mi trabajo bien y, por consiguiente, voy a ser la persona más feliz del mundo. Yo vivo para que Rufina tenga siempre una eterna sonrisa”.

Cuando se lo consulta sobre qué le gustaría que su hija sea en el futuro, destaca: “No me interesa lo que pueda llegar a ser. Yo la voy a acompañar siempre. Ella podrá ser médica, abogada, empleada administrativa o actriz. Yo voy a estar a su lado, ese es mi objetivo”.

El “anónimo” Cabré sostiene que “me encanta seguir con la vida que no se conoce de mí. Estar con mis amigos, recorrer todos aquellos lugares donde siempre fui, los bares, los lugares de encuentro donde siempre he gozado de lo que soy en mi parte privada. En esos ámbitos no soy el actor o la carita popular que se ve en la tele. Soy fulano de tal, el hijo de Perico, del que nadie se asombra. Me encanta el cariño de la gente y el afecto que despliega después de cada función, pero disfruto también la tranquilidad como lo que soy: un tipo más, como cualquier hijo de vecino”.

Para Nicolás las cosas se van desarrollando paso a paso, dejando de lado cualquier tipo de exigencia en la vida y en lo profesional. “Que el universo marque en mí su hoja de ruta. Con el tiempo fui entendiendo la importancia de saber que hay que saber disfrutar el día a día. El pasado ya fue y el mañana es una incógnita. Me interesa el presente. No quiero perder el tiempo en cosas estériles. Por otra parte, nunca he sido un tipo ambicioso. Me interesa progresar pero la paso muy feliz con lo que tengo”.

Cabré se dispone, a la par de su trabajo en la Villa, para los preparativos de perfeccionamiento de su nuevo desafío: “Sugar”. que, como se recordará, protagonizó (y ahora produce) Susana Giménez con Ricardo Darín y Arturo Puig, responsable en esta oportunidad de la dirección. “Estoy capacitándome en todo, en canto, en baile, en zapateo americano. Nunca me imaginé y me propuse trabajar en la comedia musical. Ves... esto fue un regalo del universo”.

Para el final, dos consultas que responde con su habitual cautela.

-¿Como es tu presente sentimental?

-Tranquilo.

-¿Te gustaría volver a ser papá?


-Me gustaría, pero no ocupa la agenda hoy en día. Un Nicolás Cabré auténtico. Sin máscaras ni doble faz. Tal como es. Tómame o déjame.

 

Fuente: http://www.diarioshow.com/article/details/140084/me-gustaria-tener-otro-hijo