Desesperado, Lázaro Báez quiere ampararse en los Derechos Humanos

Jueves 20 de Octubre de 2016, 07:39




Pese a que la Cámara de Casación y la Cámara Federal confirmaron la prisión preventiva de Lázaro Báez, su defensa insiste en la "ilegalidad" de su detención que ya cumplió seis meses. Esta semana no sólo pidió por segunda vez, la prisión domiciliaria -algo que el juez Sebastián Casanello rechazó-, sino que requirieron la intervención de un veedor internacional de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH calificando de "arbitraria" la detención del socio de Cristina Kirchner.

El empresario K y socio comercial de los Kirchner sigue preso, está procesado por lavado de dinero, tiene un embargo de $ 800 millones y la Justicia ya avanzó sobre 160 inmuebles adquiridos en Santa Cruz. Sus más de 15 empresas tienen un final anunciado: el cierre defintivo. Su multimedio dejó de funcionar hace un mes, Austral Construcciones empresa que manejó $ 33.800 millones de contratos viales, está inactiva, inhibida y sin empleados.

El presente de Báez es poco prometedor, su imperio se derrumba y las internas familiares no contribuyen cuando de unificar criterios en la defensa judicial se trata.

Por tercera vez en la causa por lavado de dinero que investiga el juez Casanello y el fiscal Guillermo Marijuan, cambió sus abogados. Maximiliano Rusconi quien lo representa ahora realizó varios pedidos esta semana ante la Justicia. El primero de ellos insistió en la prisión domiciliaria del empresario K, remarcando un "deteriorado estado de salud" sumado a un cuadro "depresivo ansioso" que podría "agravarse de permanecer preso".

A la batería de medidas y escritos presentados ante el Juzgado Federal N° 7 , Rusconi sumó el pedido de un veedor internacional de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Entre sus argumentos, considera que la detención de Báez "reviste una gravedad institucional evidente". Preso desde el 5 de abril, "aún no cuenta con una condea", sostiene en el escrito. Casanello decidió la prisión preventiva, dos veces confirmada, por una posible "obstrucción a la justicia" y por "peligro de fuga". Esto fue calificado como "arbitrario" por la defensa del empresario K.

En este marco, creen necesario contar con un veedor internacional independiente, y remarcan -apuntando contra el desempeño del Fiscal que encabezó los múltiples allanamientos en el sur-, que un especialista de la Corte Interamericana podría aportar "credibilidad y legitimidad al proceso". Rusconi considera que el Fiscal y el Juez son "presionados constantemente" y que un veedor se convertiría en un "apoyo extra ante decisiones que, en el marco de este particular expediente, pueden resultar difíciles de tomar".  

El dueño de Austral Construcciones se quejó en reiteradas oportunidades de los allanamientos a sus propiedades, como de los embargos trabados y confirmados al igual que del procesamiento por lavado de activos. También de la imputación de sus cuatro hijos investigados por la UIF por ser titulares y/o beneficiarios de cuentas en Suiza usadas para mover sumas millonarias de dinero. El reclamo contra el Magistrado a quien infructuosamente buscó recusar junto a su hijo Leandro, no es nuevo.

En esta etapa de la causa que expuso entre otras cosas, la cantidad de inmuebles adquiridos durante el kirchnerismo por Báez (más de 200 en diez provincias diferentes), como también su patrimonio que de declarar en 2013 sólo $ 66 millones, la Justicia ya estima que el valor real asciende a U$S 220 millones, la defensa del empresario K quiere "mayores garantías" en el proceso de investigación y cree que el camino es la intevención de la Corte Interamericana.

El fiscal aún debe dictaminar sobre el nuevo pedido de la prisión domiciliaria que se presentó después que el cuerpo forense de médicos, consideró que las patologías crónicas del empresario K (hipertensión, diabetes, asma bronquial leve, gastritis) no revisten de gravedad para dejar el penitenciario.



Fuente: http://www.clarin.com/politica/Desesperado-Lazaro-Baez-recurre-CIDH_0_1671433011.html