¿Son saludables los gimnasios?

Martes 13 de Septiembre de 2016, 15:09





El ejercicio es sano, pero ¿y el ambiente en el que lo realizamos?

Un nuevo estudio sobre la calidad del aire en los gimnasios plantea algunas preguntas interesantes acerca de sí estos lugares son tan saludables como deberían ser.

Lo malo de ir al gimnasio.

En la nueva investigación se instalaron equipos de vigilancia de la calidad del aire en 11 gimnasios de Lisboa. La mayoría de estos gimnasios cuentan con una sala de pesas y máquinas, de espacios más pequeños para las clases de aeróbic, sesiones de yoga y otros tipos de programas similares.

Se  midieron los niveles de contaminantes en el aire durante la tarde o por la noche, cuando los gimnasios suelen estar más llenos de gente.

Los contaminantes que se midieron fueron el monóxido de carbono, el dióxido de carbono, el ozono, partículas suspendidas en el aire (como polvo) y diversos productos químicos liberados por las alfombras, productos de limpieza, muebles o pintura, incluyendo el formaldehído.

En general, los gimnasios mostraron altos niveles de polvo en el aire, de formaldehído y de dióxido de carbono. Las concentraciones de estas sustancias en general superaron los estándares más aceptados para la calidad del aire interior.

Los niveles de estos compuestos fueron especialmente altos durante las clases de aeróbic nocturnas, cuando hay muchas personas que abarrotan pequeñas habitaciones removiendo el polvo y resoplando fuertemente, produciendo dióxido de carbono con cada respiración.
 
Lo peor es

Las altas concentraciones de polvo y de productos químicos, como el formaldehído, en el aire en los gimnasios los que representan mayor problema.

En concentraciones suficientes, estas sustancias pueden contribuir al asma y otros problemas respiratorios.

Casi la totalidad de los gimnasios en el estudio tenían niveles de estas sustancias que excedían significativamente los estándares europeos de calidad de aire interior saludable.

Unos niveles elevados de dióxido de carbono indican que el lugar tiene poca ventilación, y aunque no tóxico para las personas, también podría ser motivo de preocupación, ya que a elevadas concentraciones puede contribuir a la fatiga corporal e incluso crear ciertos problemas cognitivos.
 
Cuando hacemos ejercicio, la mayoría de las inspiraciones las hacemos a través de la boca, sin que el aire pase por el sistema de filtración natural de la nariz. Por lo que los contaminantes van directamente a a los pulmones.


Fuente: https://www.euroresidentes.com/salud/salud-hoy/son-saludables-los-gimnasios